martes, 13 de abril de 2010

Hereda respeto... Rompe patrones de crianza

Quizá una de las tareas más difíciles que nos toca realizar en la vida sea la de criar y educar a nuestros hijos. La mayor parte de la educación, se hace de una forma intuitiva partiendo de los modelos y esquemas que cada uno obtuvo de sus padres y familiares en general; sucede en el día a día, sin pensar mucho en algunos detalles que en realidad son fundamentales.


La educación basada en los roles de género (lo que te toca hacer por ser niño o niña) es, en principio, un patrón que se aplica generación tras generación a prácticamente todos.

Hoy, la realidad nos enfrenta a situaciones de vida en que los nuevos roles ya no se acoplan a los patrones anteriores. Por ejemplo, la idea de actividad de uno y pasividad de la otra ya no es aplicable. Poco a poco el rol de la mujer se ha establecido hacia la igualdad en cuanto a la actividad, económica, social y política, entre muchas otras, y estos cambios logrados (no con facilidad, por cierto) representan también cambios en el desarrollo de su papel en pareja y en familia.

Del mismo modo, para los hombres hoy en día, la idea de su propio papel a desarrollar se ha visto modificada y puede no resultar tan clara. La expresión de este conflicto puede llevar a un tipo de agresión que nace de la inseguridad y del desconocimiento sobre el nuevo rol como pareja y/o padre.

Romper con los patrones de crianza nos lleva a replantearnos una vida a través de los valores de igualdad, respeto y responsabilidad aplicados dentro del ambiente familiar, donde las tareas se compartan y se disfrute de la comunicación.

Trabajemos por un ambiente en el que hablar, discutir, establecer límites y negociar sean las tareas cotidianas en las que todos y cada uno se esfuercen por mantener.

Puede resultar cómodo seguir educando como fuimos educados, desde el control, la amenaza, el miedo o el autoritarismo puro: “por que lo digo yo”. Y escudarnos diciendo que gracias a como fuimos educados “hemos logrado ser lo que somos”, pero siempre es posible mejorar. Siempre será posible la otra forma de vida en la que no sea cuestión de ejercer el poder sobre los otros sino cultivar la seguridad y el crecimiento de todos en una vida sin violencia.

2 comentarios:

  1. lo dificil va a ser que la gente se de cuenta que tal vez la manera en la que fueron educados no es la correcta ya que siempre es y sera mas facil criticar a los demas que ver nuestros propios errores y buscar mejorar.

    El estereotipo de educacion se ha ido modernizando para bien y para mal, por ejemplo un factor positivo es enseñar que todas las labores fueron creadas tanto para hombres como para mujeres y uno negativo es la tipica actitud machista del padre que le va a los pumas que tiene preferencia hacia el hijo varon..pero bueno.. el punto es que deben llegar ambas partes a entender que los roles se han homogeneizado y que ya no hay nada hecho para nadie..todos estamos hechos para entrar a esta jungla de trabajos llamada sociedad.

    me encanta el blog!

    ResponderEliminar
  2. Saber que somos capaces de cometer errores puede permitirnos estar al pendiente y al menos no repetirlos tanto o corregirlos cuando así suceden.
    Gracias por tu comentario.

    ResponderEliminar