La otra forma de vivir -esa que reconocemos en algunas mujeres afortunadas y que por alguna extraña razón pensamos que nosotras no merecemos, que no es real, que sólo le sucede a las suertudas, en pocas palabras, que la pueden tener todas menos tú- empieza a suceder cuando nos valoramos y nos vemos al espejo sin desear que se rompa en mil pedazos. Cuando te permites sentir que cada una de tus faenas es valiosa por que tú las realizaste; cuando decides escucharte para no ir en contra tuya y ya no prestas oído a lo que te duele ni a lo que, desde afuera, otros dicen que quieren cambiar en ti.
Pensemos en todo lo que implican nuestras labores, en lo mucho que les dedicamos a los otros a lo largo del día (y de la noche) y valoremos desde este momento cada acción pues lo más importante que hay en nuestras vidas somos nosotras mismas: sin nosotras nada de eso ocurriría.
Pudiera parecer extraño pero si aún no lo has intentado, ¿qué tal empezar por hablarte y comunicarte contigo? Sí, eso de escucharnos y hablarnos a nosotras mismas no es “cosa de locas”. Se trata de poner mucha atención a lo que nuestra voz interior nos grita y a la que no hacemos mucho caso. Esa voz nos ha dicho en varias ocasiones que algo no está bien, pero generalmente la ignoramos y terminan siendo otros quienes, desde afuera, nos dicen lo que está bien o mal, sin ponerse realmente en nuestros zapatos. El ensayo y el error son la parte emocionante de ponernos a prueba, pero si decidimos hacerle caso a los demás, nos perdemos la oportunidad de saber si teníamos o no la razón y será más fácil encontrarnos sintiendo frustración y enojo.
Pero cuidado, si fallas, tampoco seas demasiado dura contigo: Apapáchate y dedícate los minutos que quieras al día para reflexionar, disfrutar y dejar de lado tus temores, angustias y reclamaciones.
¿Qué tal si empezamos a pensar y a hacer las cosas de manera diferente? Vamos a dejar de comprarnos ideas y malas interpretaciones como eso de que pensar en nosotras mismas es egoísmo; que eso de ver por ti antes que por tus hijos, tus padres, tu pareja, tu jefe o tus amigos es de muy mal gusto o incorrecto. En realidad no es así. Si quieres ayudar, cuidar de alguien, amarlo o hacerlo feliz no podrás lograrlo si no empiezas por ti. Podrás ofrecer mucho más cuando hayas podido darte a ti en primer lugar y no dejarte al último. Imagínate, si no decimos lo que queremos (porque nos da miedo, vergüenza, o por cualquier otra razón), esperando que nos adivinen el pensamiento, los deseos o las necesidades (y entonces será mejor esperar sentadas), si nosotras no nos lo damos ¿por qué otros tendrían que hacerlo?
Colmarte de lo mejor de la vida, de ese amor incondicional y pleno es: la otra forma de vivir.
¡Vamos a Intentarlo!
Creer en uno mísmo es lo más importante para salir adelante, pues nosotros somos los únicos actores de nuestra existencia.
ResponderEliminarLos únicos límites son los que nosotros nos ponemos, tenemos que aprender a romper las barreras.
La adversidad es un espejo en el que deben de mirarse todos aquellos que realmente quieran conocerse
Hola
ResponderEliminarEs muy cierto que muchas de nosotras nos dejamos llevar siempre por lo que dicen los demas... y que envidiamos lo que otras tienen... debemos empezar por poner los pies en la tierra y ver donde estamos y hasta donde queremos llegar..... y para poder conseguirlo creo que debemos empezar por valorarnos y estar seguras de que podemos llegar muy lejos todo esta en nosotras ...asi que animo y si aun no lo han hecho comenzemos hoy por ver que dentro de nosotras hay una GRAN MUJER
Algunas preguntas que nos pueden servir para comunicarnos con nosotros mismos son : ¿dónde estás? ¿Dónde quieres ir? ¿Qué debes hacer? ¿Quién eres? Las respuestas son el camino definitivo para encontrarte y desarrollarte integralmente en todas tus dimensiones, para comprender el verdadero significado del éxito y para ser, la dueña de tu vida.
ResponderEliminarSaludos Anna
Creo que todas hemos vivido que algunas veces cuando vamos a salir a algún lado , nos miramos al espejo y no nos gusta lo que vemos!! Que si tengo el cabello lacio….. lo quiero chino, que si es chino lo quiero lacio, nunca estamos conformes…. Pero es un hecho (y la vida me lo ha demostrado infinidad de veces) que si nos sentimos bien con nosotras mismas, entonces todos a nuestro alrededor nos verán así. Todas somos valiosas Seamos positivas todas las cosas saldrán bien……..Salgamos a VIVIR!
ResponderEliminarQuiero compartirles una frase muy cierta…. “Lo que ahoga no es meterse al río, si no mantenerse sumergido en él”
Saludos a todos y gracias por estos articulos!!! =)
Hola amigos:
ResponderEliminarUna de las maneras de comprender nuestra realidad, es a través del autoconocimiento.
La percepción que tenemos del mundo es meramente esa, una percepción del estímulo ante el entorno en que transitamos y takl pareciera que es inherente a la naturaleza humana el estadío de reflexión o de preguntarse : ¿qué estoy haciendo aquí o para qué estoy aquí? en algún momento de nuestra vida.
Como dirían algunos doctos en el tema: "Te llegó tu momento Dantesco", es decir, un momento que sólo es tuyo y que debiera ser aprovechado para la reflexión interior y la retrospectiva.
Con la conciencia abierta y desarrollada , esta misma trabaja para uno mismo y uno de sus logros precisamente es lo que podemos llamar: Autoestima y todod lo que el ser humano puede hacer si se diera el tiempo concientemente de reconocerse como un ser único y especial, pero con una esencia divina compartida con el semejante.
¡Saludos!
Everardo Pérez (Celaya)
Lo que dice este artículo es muy cierto, no podemos esperar que otros nos den lo que queremos, tenemos que ir por la vida sin tener miedos, y fortaleciendo nuestra seguridad cada día. Vale la pena intentarlo!!!
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